SPEAKER
FELIPE GOMEZ
AUTOR Y SPEAKER INTERNACIONAL ENTREVISTA A
NATALIA PONCE DE LEÓN
ACTIVISTA Y CONFERENCISTA
BIO
Natalia Ponce de León
Ejemplo de valentía, tenacidad y lucha, una de las figuras más admiradas de Colombia.
Renació de las cenizas después del atroz y doloroso ataque con ácido sulfúrico del que fue víctima en el año 2014.
Directora de la Fundación Natalia Ponce de León, entidad sin ánimo de lucro creada para defender, promover y proteger los derechos humanos de las personas víctimas de ataques con químicos.
Gestora de la Ley 1773 del 6 de enero de 2016, conocida como “Ley Natalia Ponce de León”.
Protagonista del libro “El renacimiento de Natalia Ponce de León”, escrito por la periodista Martha Soto.
Ejemplo de valentía, tenacidad y lucha.
En el 2017 ganadora de el “Secretary of State’s International Woman of Courage Award”
Ganadora de la beca “Eisenhower Fellowship 2017”
Sorprendentemente, contra lo que muchos podrían pensar, Natalia no guarda ni un gramo de rencor en su corazón pues tiene claro que el rencor sólo afecta a quien lo alberga. Como decía el gran Nelson Mandela: “El resentimiento es como beber veneno y esperar que éste mate a tus enemigos”.
Dicen los sabios que los ojos son el espejo del alma. Pues nadie mejor que Natalia para ilustrarlo: Sus bellos ojos reflejan amor, paz y profunda sabiduría. Su testimonio nos revela el sentido real y transendente de la belleza. Aunque durante algunos meses por motivos médicos se vio obligada a usar una máscara de látex para proteger su cara, muy rápidamente decidió quitarse la máscara para poder enfrentar el mundo con total seguridad y transparencia. Sin duda una gran lección para un mundo colmado de máscaras y apariencias.
Gracias a que su historia de recuperación ha sido seguida de cerca por los medios de comunicación, es imposible no catalogarla como una de las personas más admiradas de los últimos tiempos, porque su demostración de fortaleza y tenacidad han generado en la gente profundas reflexiones sobre el valor de la vida, la importancia de la familia, el poder de la mente, los valores, el amor, la belleza, y, sobre todo, la enorme fortaleza del cuerpo humano y el innegable poder de la inteligencia emocional.
Según Martha Soto, autora del libro “El Renacimiento de Natalia Ponce de León”, la adversidad, claramente, se le convirtió en un poderoso motor que le permitió reinventarse y reconstruirse, por dentro y por fuera. Nadie sabe de dónde sale la fuerza con la que Natalia respira de nuevo, piensa de nuevo y sueña de nuevo.
En virtud de su historia, millones de personas ahora conocen el poder destructivo del ácido sulfúrico. Natalia claramente se ha convertido en la cara visible de miles de personas que han padecido este abominable tipo de violencia.
Gracias a su fortaleza mental y física, y a su encomiable sentido de liderazgo, el 9 de abril de 2015 cumplió uno de sus grandes sueños: logró constituir la Fundación Natalia Ponce de León, entidad sin ánimo de lucro creada para defender, promover y proteger los derechos humanos de las personas víctimas de ataques con químicos. En su rol de activista, es reconocida como gestora de la Ley 1773 del 6 de enero de 2016, conocida como “Ley Natalia Ponce de León”. Su mayor prioridad ahora es construir un gran Pabellón de Quemados para poder ayudar a las numerosas víctimas que lamentablemente se siguen presentando en Colombia.
Ejemplo de valentía, tenacidad y lucha, una de las figuras más admiradas de Colombia.
Renació de las cenizas después del atroz y doloroso ataque con ácido sulfúrico del que fue víctima en el año 2014.
Directora de la Fundación Natalia Ponce de León, entidad sin ánimo de lucro creada para defender, promover y proteger los derechos humanos de las personas víctimas de ataques con químicos.
Gestora de la Ley 1773 del 6 de enero de 2016, conocida como “Ley Natalia Ponce de León”.
Protagonista del libro “El renacimiento de Natalia Ponce de León”, escrito por la periodista Martha Soto.
Ejemplo de valentía, tenacidad y lucha.
En el 2017 ganadora de el “Secretary of State’s International Woman of Courage Award”
Ganadora de la beca “Eisenhower Fellowship 2017”
Sorprendentemente, contra lo que muchos podrían pensar, Natalia no guarda ni un gramo de rencor en su corazón pues tiene claro que el rencor sólo afecta a quien lo alberga. Como decía el gran Nelson Mandela: “El resentimiento es como beber veneno y esperar que éste mate a tus enemigos”.
Dicen los sabios que los ojos son el espejo del alma. Pues nadie mejor que Natalia para ilustrarlo: Sus bellos ojos reflejan amor, paz y profunda sabiduría. Su testimonio nos revela el sentido real y transendente de la belleza. Aunque durante algunos meses por motivos médicos se vio obligada a usar una máscara de látex para proteger su cara, muy rápidamente decidió quitarse la máscara para poder enfrentar el mundo con total seguridad y transparencia. Sin duda una gran lección para un mundo colmado de máscaras y apariencias.
Gracias a que su historia de recuperación ha sido seguida de cerca por los medios de comunicación, es imposible no catalogarla como una de las personas más admiradas de los últimos tiempos, porque su demostración de fortaleza y tenacidad han generado en la gente profundas reflexiones sobre el valor de la vida, la importancia de la familia, el poder de la mente, los valores, el amor, la belleza, y, sobre todo, la enorme fortaleza del cuerpo humano y el innegable poder de la inteligencia emocional.
Según Martha Soto, autora del libro “El Renacimiento de Natalia Ponce de León”, la adversidad, claramente, se le convirtió en un poderoso motor que le permitió reinventarse y reconstruirse, por dentro y por fuera. Nadie sabe de dónde sale la fuerza con la que Natalia respira de nuevo, piensa de nuevo y sueña de nuevo.
En virtud de su historia, millones de personas ahora conocen el poder destructivo del ácido sulfúrico. Natalia claramente se ha convertido en la cara visible de miles de personas que han padecido este abominable tipo de violencia.
Gracias a su fortaleza mental y física, y a su encomiable sentido de liderazgo, el 9 de abril de 2015 cumplió uno de sus grandes sueños: logró constituir la Fundación Natalia Ponce de León, entidad sin ánimo de lucro creada para defender, promover y proteger los derechos humanos de las personas víctimas de ataques con químicos. En su rol de activista, es reconocida como gestora de la Ley 1773 del 6 de enero de 2016, conocida como “Ley Natalia Ponce de León”. Su mayor prioridad ahora es construir un gran Pabellón de Quemados para poder ayudar a las numerosas víctimas que lamentablemente se siguen presentando en Colombia.
LA VIDA RENACE